Boca es el nuevo campeón del fútbol argentino después de una campaña estupenda y una victoria aplastante ante el Banfield de Lavolpe , que solo fue el invitado a la enorme fiesta azul y oro que celebro su nuevo titulo, el 24to del profesionalismo. ¡Aguante Boca Campeón!
Dosifica los goles como si le fuera la vida en ello, ganando como no queriendo, a la fuerza, por la inercia o hábito de haber hilado tantas victorias y el invicto así. Pero nada de eso importa al verdadero hincha 'Xeneize' que, después de tantos torneos en la ignominia, vuelve a gritarle "¡campeón!" a todo el fútbol argentino, a los cuatro vientos.
Sin el tiempista Juan Román Riquelme de inicio, como en buen tramo de la temporada, los anfitriones, con el libreto de Julio César Falcioni en mano, administraron el gasto y pegaron cuando tenían que pegar. Sobre todo con un inspirado Darío Cvitanich que cumplió con la ley del ex al vacunar por duplicado a Banfield.
Apresurado por asegurar el campeonato desde ni bien el silbatazo de Héctor Baldassi pese a que el empate se lo daba, el elenco de la Ribera salió a matar. Avisó con un testarazo de Juan Insaurralde al larguero; no obstante, a la siguiente cobró. Luego de una especie de frontón desarrollado dentro del área, Cvitanich (9') contrarremató esquinado. No lo celebró por respeto a su ex club; no así toda la nación boquense que ya lo sentía en la bolsa.
Tras la ventaja tempranera, Boca, como suele actuar cuando va arriba, esperó un poco a Banfield, pero éste, o más bien un amilanado Ricardo Lavolpe, se rehúsó a ir a buscarlo. Sabía que la contra de su rival es muy efectiva, letal como pocas. Simplemente el 'Taladro' atacaba circunstancialmente mediante las pelotas quietas. Si acaso, a lo mucho, lo hacía con el 0-0 y tampoco era un vendaval o el Barcelona.
Boca lo enfrió aún más hasta que asestó el otro golpe casi al filo del entretiempo. Otra vez Cvitanich, con un gol de otro partido. El ex Ajax agarró de volea un corner directo ejecutado desde la derecha y la metió pegada al palo.
Diego Rivero lo liquidó recién comenzado el complemento a través de un bombazo que recorrió de vértice a vértice ante la mirada de Lucchetti, a quien sólo le faltó aplaudirle. De ahí en adelante, salvo por el simbólico retorno de Riquelme, le sobraron minutos al enfrentamiento.
Pitazo final , la fiesta comienza y se extiende . Los cánticos no dejan de sonar. Los jugadores no paran de saltar y abrazarse , este campeonato es de todos. Todos hicieron posible este sueño .
Los gorros azul y oro infaltables, cotillón por todas partes. Los hijos de los jugadores festejando desde una zona privilegiada , el flaco Schiavi que pide que le pasen a su nene desde la platea, Clemente emocionadosimo con sus chicos. Roman de la mano con sus queribles hijos a punto de levantar la copa.
Una vez levantada ,los clasicos papelitos azul y oro vuelan , los jugadores se pasan la copa para poder tocar el triunfo en sus manos, todos ensayan el avioncito hacia el trofeo que reposa cerca del arco. Las notas de todos los canales que cubren al campeon , y luego el vestuario a pura joda. Mientras el obelisco es una fiesta y en cada rincon del pais lo es. Todos al grito de : "Gracias Campeon" .
1 comentarios:
:d :*
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